Introducción. Si en los breves versículos anteriores se exaltó el aspecto plural de la fe, en este pasaje el asunto se hace más profundo aún y muy significativo. El Apóstol Pablo dice que a causa del Amor que les tiene, todo lo que él hace y experimenta, es compartido por ellos. Meditemos ahora en este pasaje del libro de Filipenses y encontremos algunas enseñanzas especiales que nos ayudan a experimentar la vida en plural con el cuerpo de Cristo que es Su Iglesia.
1.- El Amor es un derecho. El Apóstol Pablo no se siente obligado a Amar a sus hermanos y amigos de la Iglesia de Filipos, más bien reclama el derecho de Amarlos y de llevarlos en el corazón.
a) Considera que su Amor es un acto de justicia, “Como me es justo sentir esto de todos vosotros, por cuanto os tengo en el corazón” y la causa de ello es la presencia, la integración, la compañía y el mutuo compañerismo que tiene con ellos, vale decir, había una empatía muy grande con la Iglesia. Considera justo Amar a sus hermanos y amigos porque los tenía impregnado en su corazón y en cualquier circunstancia, en la cárcel y en todas las aventuras del ministerio.
b) Considera que el Amor es un acto de solidaridad. “Todos vosotros sois participantes conmigo de la Gracia”. Los cristianos son solidarios en la Gracia, son personas que comparten una deuda común con la Gracia de Dios. Son solidarios también en la obra del evangelio, vale decir, no solo comparten un don, sino también una tarea común: La extensión del evangelio. Los cristianos también son solidarios en el sufrimiento del evangelio
2.- El Amor es un milagro. De acuerdo con las declaraciones del Apóstol Pablo, los cristianos de Filipos estaban con él en todas sus experiencias, buenas o malas, esto significa que:
a) El Amor hace posible lo imposible para la razón, el Amor supera los límites de espacio y tiempo.
b) El Amor puede transformar a los seres humanos de la manera más extraordinaria. ¡Qué diferente es este Pablo con el Saulo que describe Lucas: “Saulo, respirando aún amenazas y muerte contra los discípulos del Señor, vino al sumo sacerdote, y le pidió cartas para las sinagogas de Damasco, a fin de que si hallase algunos hombres o mujeres de este Camino, los trajese presos a Jerusalén” (Hechos 9:1-2) con el siervo de Dios, que desde la cárcel respira Amor, manifiesta palabras como las siguientes: “Porque Dios me es testigo de cómo os Amo a todos vosotros con el entrañable amor de Jesucristo”! El Amor de Cristo lo había transformado.
c) Muchas cosas pueden cambiar en nuestra vida cuando nos atrevamos a vivir el Amor de Dios. Atrevámonos a decir te Amo más seguido, aprendamos a mostrar nuestro Amor con palabras y con hechos. Vivamos el milagro del Amor.
3.- El Amor es un asunto Divino. “El entrañable Amor de Jesucristo” dijo el Apóstol Pablo, esto nos habla del lado Divino del Amor.
a) No podemos Amar de verdad sin una relación personal con aquel que es el Amor en persona, Jesucristo.
b) El Amor comienza y termina en Dios, así que el Amor que el Apóstol Pablo tenía y sentía por sus hermanos y amigos en Cristo, no surgía de su propia inteligencia, habilidad o religiosidad, sino de su íntima comunión con Jesús con el cual se encontró camino a Damasco.
Oremos
Haga una oración especial por su Iglesia, para que cada día seamos más parecidos a Cristo y una comunidad de fe en Jesús, donde el Amor sea parte natural de nuestras relaciones y los demás lo puedan notar.
Tareas:
1.- Decídase Amar a aquellas personas con las cuales no se lleva muy bien y verá que el Amor cambia las relaciones.
2.- Aprenda de memoria estos textos: “Doy gracias a mi Dios siempre que me acuerdo de vosotros, siempre en todas mis oraciones rogando con gozo por todos vosotros, por vuestra comunión en el evangelio, desde el primer día hasta ahora; estando persuadido de esto, que el que comenzó en vosotros la buena obra, la perfeccionará hasta el día de Jesucristo” (Filipenses 1:3-6).
En el Amor del Señor,
Pr. Edgardo Salamanca M.