"Proveer a la Iglesia de un discipulado integral y formativo basado en la sana doctrina encontrada en la Biblia"
El Ministerio docente en la Iglesia, bajo la dirección del espíritu Santo, comprende la relación de maestro y discípulo, entre Jesús y el creyente. La palabra de Dios es el contenido esencial y fundamental en este proceso de aprendizaje cristiano. El programa de Educación Cristiana en la Iglesia es necesario para la instrucción y el adiestramiento de sus miembros para “Creced en la gracia y el conocimiento de nuestro Señor y Salvador Jesucristo”. A la Iglesia le cabe cuidar el adoctrinamiento adecuado de los creyentes con el objetivo de formarlos y desarrollarlos espiritual, eclesial y moralmente; motivarlos y capacitarlos para el servicio cristiano y desempeño en el cumplimiento de la misión de la Iglesia en el mundo (salmo 119:2; Mateo 11:29,30; 23:10; Juan 13:14-17; 14:26; Hechos 2:42; 1ª Corintios 3:1,2; Efesios 4:11-16; 6:10-20; Filipenses 4:8,9; Colosenses 1:28; 2ª Timoteo 2:2,15; 3:16,17; 4:2-5; 1ª Pedro 2:2,3; 3:15; 2ª Pedro 3:18).
Objetivos
Proveer a través de la música, la danza, la poesía, un medio para que los creyentes y simpatizantes adoren el Santo nombre de Dios en todas las actividades de la Iglesia, y por medio de este ministerio guiar a toda la congregación a expresar la mejor comunión a Dios el Padre por medio de Jesucristo su Hijo, en la adoración y alabanza, bajo la dirección del espíritu Santo.
